Del libro "Hatha Yoga Pradipika" Swami Muktibodhananda
VERSO 2
"Postrado primero ante el gurú, Yogi Swatmarama instruye el conocimiento de hatha yoga solo para (raja yoga) el estado más elevado de yoga."
Al postrarse primero ante el gurú, Yogi Swatmarama indica que él es sólo una herramienta de transmisión para el conocimiento que ha de ser impartido. También se enfatiza que el hatha yoga debe practicarse con el único propósito de prepararse para el estado más elevado de raja yoga, es decir, samadhi.
Originalmente, un sadhaka practicaba hatha yoga durante muchos años para prepararse para el despertar de kundalini, o en términos de raja yoga, para la experiencia del samadhi. Sin embargo, en los últimos cincuenta años, con el renacimiento del yoga en Occidente, parece que el objetivo real de el hatha yoga se ha pasado por alto o incluso se ha olvidado por completo. Hoy en día, el yoga se practica generalmente para mejorar o restaurar la salud, para reducir el estrés, prevenir el envejecimiento del cuerpo, fortalecer el cuerpo o para embellecerlo. El hatha yoga cumple estos objetivos, pero debe tenerse en cuenta que ciertamente no son el objetivo.
Al practicar las técnicas de hatha yoga, el potencial físico y mental comienza a aumentar y desarrollarse. Conocemos a el ser humano utiliza sólo una décima parte de su capacidad cerebral total. Esto significa que nueve décimas partes permanecen inactivas, a la espera de ser puestas en acción. La ciencia llama al cerebro inactivo el "área silenciosa". Poco se sabe sobre su capacidad, pero los neurólogos dicen que tiene algo que ver con la capacidad psíquica de las personas. Después de una larga y ardua práctica de yoga, el potencial psíquico se manifiesta, tal vez en forma de clarividencia, clariaudiencia, telepatía, telequinesis, curación psíquica, etc. Estos son llamados siddhis o "perfecciones". Algunas personas los consideran un gran logro, pero son sólo manifestaciones temporales que pueden incluso obstaculizar un mayor progreso espiritual. El objetivo de todo sadhana yóguico es descubrir y experimentar el espíritu universal interior, y si uno se complace en los siddhis, estos apartan a uno de la último experiencia. Por lo tanto, es mejor ignorarlos ya que no son los frutos deseado del hatha yoga.
Aunque la práctica regular de hatha yoga puede generar muchos cambios maravillosos y resultados deseados, es esencial recordar que son solo efectos secundarios. El hatha yoga no se enseña por su por su propio bien, con fines terapéuticos o para obtener beneficios mundanos o poderes psíquicos, y esto es algo que el practicante de hatha yoga debe tener en cuenta siempre.